domingo, 15 de mayo de 2011

Con tus alas al sol...



Cierro los ojos... respiro profundo... 
Ahí está, listo, desaparecí. Es ese extraño aroma que me llevó, me trajo recuerdos, sueños, me trasladó a ese pequeño espacio en el tiempo, en mí tiempo, cuando te vi volar, cuando pedí un deseo. Te posaste ahí, a la perfección, con tus hermosas alas al sol, brillando color. Dejaste una marca en mi corazón, quería tenerte, atraparte. Pero no, no podía. Te esfumaste, saliste volando  y te me escapaste.

lunes, 9 de mayo de 2011

Todo lo que tengo, es lo que ya dí.


Quiero bailar, como las hojas, al ritmo inevitable del viento.
Quiero cantar, como los pájaros, alegrando el día.
Quiero llorar, como la lluvia, bañando el mundo.
Quiero reír, como las flores, alegres en primavera.
Quiero amar, como las mariposas, que no viven sin el sol.
Quiero recordar, como un libro, escrito hace años.
Quiero sentir, como el pasto, a quien acaricia el agua.
Quiero escapar, como la arena, que vuela de tus manos.
Quiero soñar, como los gatos, que aman la luna.
Quiero desear, como un río, llenar un mar.
Quiero vivir, como cualquiera, pero diferente.

miércoles, 4 de mayo de 2011

Sí... -Kipling.



Si puedes conservar tu cabeza, cuando a tu alrededor
todos la pierden y te cubren de reproches;
Si puedes tener fe en ti mismo, cuando duden de ti
los demás hombres y ser igualmente indulgente para su duda;
Si puedes esperar, y no sentirte cansado con la espera;
Si puedes, siendo blanco de falsedades, no caer en la mentira,
Y si eres odiado, no devolver el odio; sin que te creas,
por eso, ni demasiado bueno, ni demasiado cuerdo;

Si puedes soñar sin que los sueños, imperiosamente te dominen;
Si puedes pensar, sin que los pensamientos sean tu objeto único;
Si puedes encararte con el triunfo y el desastre, y tratar
de la misma manera a esos dos impostores;
Si puedes aguantar que a la verdad por ti expuesta
la veas retorcida por los pícaros,
para convertirla en lazo de los tontos,
O contemplar que las cosas a que diste tu vida se han deshecho,
y agacharte y construirlas de nuevo,
aunque sea con gastados instrumentos!

Si eres capaz de juntar, en un solo haz, todos tus triunfos
y arriesgarlos, a cara o cruz, en una sola vuelta
Y si perdieras, empezar otra vez como cuando empezaste
Y nunca mas exhalar una palabra sobre la perdida sufrida!
Si puedes obligar a tu corazón, a tus fibras y a tus nervios,
a que te obedezcan aun después de haber desfallecido
Y que así se mantengan, hasta que en ti no haya otra cosa
que la voluntad gritando: “persistid, es la orden!!”

Si puedes hablar con multitudes y conservar tu virtud,
o alternar con reyes y no perder tus comunes rasgos;
Si nadie, ni enemigos, ni amantes amigos,
pueden causarte daño;
Si todos los hombres pueden contar contigo,
pero ninguno demasiado;
Si eres capaz de llenar el inexorable minuto,
con el valor de los sesenta segundos de la distancia final;

Tuya será la tierra y cuanto ella contenga
Y -lo que vale más- serás un hombre! hijo mío!